¿Para qué sirve el frasco o la botella de la calma? ¿Cómo se realiza?
La botella o frasco de la calma es un recurso que nos permite tomarnos un tiempo visual para calmarnos o tranquilizarnos frente a diferentes situaciones. Facilita un mejor aprendizaje y un buen vínculo entre todos. Aprender a conocer, expresar y controlar las emociones es fundamental para la infancia.
Se trata de un frasco o botella que tendrá adentro elementos que se moverán al agitarlo. Como todo aquello que se agita, volverá a la calma cuando se lo deje quieto o en reposo. En este recurso los niños verán representado lo que sucede dentro de ellos. Les servirá de "guía" para volver a la calma.
Pueden armar un "Rincón de la calma" en la escuela o en casa cerca de una ventana, colocar la botella en un lugar visible y alcanzable. También pueden colocar cerca algún instrumento que tranquilice o una música suave.
¿Cómo se realiza? En el siguiente video de nuestro canal está explicado paso a paso.
Materiales:
- 1 frasco o botella (en lo
posible de plástico).
- 2 cucharadas de pegamento
con brillo.
- 3 cucharadas de purpurina o
brillantina.
- agua caliente.
Elaboración:
1. Calentar agua, no es
necesario que este hirviendo. Mezclar el agua caliente con el pegamento con
brillo. Revolver para disolver el pegamento.
2. Agregar purpurina y
objetos pequeños que les gusten (lentejuelas, mostacillas, canutillos, formas,
etc).
3. Cerrar bien y ¡ya
está listo para agitarlo!
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